LA LEY DEL EMBUDO

Es evidente que una subida de impuestos no es algo que le guste a nadie, ni algo que dé rentabilidad política al gobierno que la lleva a cabo. El Gobierno de España no va a salir precisamente reforzado por la subida del IVA. De nada sirve decir que la presión fiscal y el IVA en España es de los menores de Europa. A todos nos fastidia pagar más. Pero también todos queremos servicios sanitarios, educación, comunicaciones, …, y eso hay que pagarlo.

El Gobierno tiene, además, enfrente una oposición que practica aquello del “haz lo que yo diga pero no lo que yo haga”. Mientras piden que no suba el IVA, allá donde gobiernan suben los impuestos. Véase sus buques insignia: a nivel regional, la Comunidad de Madrid, y a nivel local, la ciudad de Madrid.

Rajoy, el 14 de Marzo declara “La subida del IVA es el sablazo que el mal gobernante le pega a sus compatriotas”. El Observatorio de FAES, sin embargo, en Febrero de 2009 establece: “Una de las propuestas clave es reducir cotizaciones sociales y compensar la pérdida de recaudación con un aumento del IVA. Además, el IVA no sólo grava los bienes producidos en España sino también las importaciones. Es decir, esta medida beneficiaría a los exportadores y nos haría ganar competitividad.”

Esa es la “ley del embudo” que practica habitualmente el PP. Lo ancho para ellos y lo estrecho para los demás.

Traslademos esto a Santomera: en Enero de 2008, anunciaba el Concejal de Hacienda, Ricardo Férez la congelación de impuestos para el resto de legislatura y la bajada de la contribución en un 9%. Lo cierto es que desde que gobierna José María Sánchez, la contribución ha subido un 25%, y este año subirá en torno a un 15%. Para comprobarlo, sólo hay que comparar los recibos.

Pero que nadie se confunda, para José María Sánchez, la culpa seguro que es de los socialistas.