La revista local, cada día que pasa, se convierte un poco más en el instrumento de propaganda de José María Sánchez y su banda. "La pompa, el boato y el peloteo al por mayor" no permite la existencia de voces disonantes en la revista, ni siquiera la de aquellas que son ofendidas o agraviadas desde sus páginas.
Hablo de la censura que José María Sánchez promueve desde la revista local contra su predecesor y el PSOE local a raíz de las acusaciones vertidas por el mismo sobre el gobierno anterior por el contrato de abastecimiento de agua suscrito en 2003 con Aqualia.
Hace un mes el señor Sánchez acudió a La Calle para arrojar una piedra sobre la cabeza del anterior alcalde acusándolo de haber firmado un contrato que perjudicaba a los vecinos y a las arcas municipales.
Como sustento a su acusación afirmó que el esfuerzo de los vecinos por ahorrar agua le estaba costando caro al ayuntamiento, pues éste había pagado a la empresa unos 59.000 euros en los dos últimos años por culpa de aquel contrato.
Inmediatamente el anterior alcalde salió a la palestra para desmentir esas acusaciones. El ayuntamiento según José Antonio Gil no ha pagado un solo euro a Aqualia en estos dos últimos años. Y precisa "lo que ha pasado es que el consistorio ha dejado de ingresar 59.000 euros y sólo ha ingresado 1.000 euros en concepto del canon que le correspondía cobrar gracias al contrato que ahora José María pone en entredicho".
Igualmente señaló que "gracias a ese contrato los santomeranos pagamos el agua más barata que nuestros vecinos de Abanilla, Beniel o Murcia".
Pero estas y otras afirmaciones del anterior alcalde y su partido no han sido publicadas en La Calle y han caído en saco roto, a pesar de que hasta en dos ocasiones habían sido remitidas a la redacción de la revista, porque José María Sánchez ha prohibido su publicación.
Hace un mes el señor Sánchez acudió a La Calle para arrojar una piedra sobre la cabeza del anterior alcalde acusándolo de haber firmado un contrato que perjudicaba a los vecinos y a las arcas municipales.
Como sustento a su acusación afirmó que el esfuerzo de los vecinos por ahorrar agua le estaba costando caro al ayuntamiento, pues éste había pagado a la empresa unos 59.000 euros en los dos últimos años por culpa de aquel contrato.
Inmediatamente el anterior alcalde salió a la palestra para desmentir esas acusaciones. El ayuntamiento según José Antonio Gil no ha pagado un solo euro a Aqualia en estos dos últimos años. Y precisa "lo que ha pasado es que el consistorio ha dejado de ingresar 59.000 euros y sólo ha ingresado 1.000 euros en concepto del canon que le correspondía cobrar gracias al contrato que ahora José María pone en entredicho".
Igualmente señaló que "gracias a ese contrato los santomeranos pagamos el agua más barata que nuestros vecinos de Abanilla, Beniel o Murcia".
Pero estas y otras afirmaciones del anterior alcalde y su partido no han sido publicadas en La Calle y han caído en saco roto, a pesar de que hasta en dos ocasiones habían sido remitidas a la redacción de la revista, porque José María Sánchez ha prohibido su publicación.
El señor Sánchez tira la piedra y esconde la mano. ¡ Qué vergüenza !
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2 comentarios:
Bueno según la revista la calle y el boletín del PP, este pueblo es el paraíso, en solo dos años han hecho 100 obras en los colegios, nadie las puede conocer. Vaya payasada. Es la 1ª vez que en un colegio de Santomera, se meten a los chiquillos en una caseta de obra. Ahora en 2 meses van a hacer 3 aulas con despachos y aseos
Advertí en este blog que no se publicaría la opinión, que digo la opinión, la realidad de la gestión del tema del agua en Santomera en la revista "La Calle". No sabeís hasta donde son capaces de llegar los miembro del equipo de gobierno de nuestro Ayuntamiento, con tal de que nadie ponga en entredicho sus mentiras y su forma de liar a la gente. La revista de "La Calle" debería de llamarse la revista del "Alcalde" y que escriba en ella lo que le parezca y que la lean sus votantes que para ello es el alcalde de los que le votaron. No esperaba menos de este personaje.
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