CARTA DE LOS ALUMNOS A LOS CIUDADANOS DE SANTOMERA
Estimados ciudadanos/as:
Nosotros, los alumnos del IES Poeta Julián Andúgar de Santomera que acudimos a la manifestación del 13 de enero celebrada en dicha localidad, queremos pronunciarnos ante el trato recibido en algunos medios de comunicación.
Queríamos aclarar que acudimos a la manifestación por propia voluntad y sin ningún tipo de manipulación u “orientación” por parte de los profesores del centro. Además, nos hemos sentido ofendidos por las diferentes declaraciones que acusan a los profesores de incitarnos a participar en la manifestación durante horas lectivas, algo que (además de ser un hecho grave) es totalmente falso. Los profesores no se pusieron en contacto con nosotros ni influyeron de modo alguno en nuestra decisión de asistir a la manifestación. Simplemente, decidimos asistir para mostrar nuestra disconformidad con la Ley de Medidas Extraordinarias del Gobierno Regional, la cual consideramos tremendamente injusta y que nos perjudica, no sólo como alumnos de un centro público que somos, sino también como ciudadanos de a pie.
Pedimos que se respeten nuestras decisiones, que no se nos trate con un paternalismo que no merecemos y que no se tergiverse la información para utilizarla como arma arrojadiza contra los docentes que, al igual que nosotros, no estaban mas que ejerciendo su derecho a manifestarse.
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13 comentarios:
Me siento muy orgulloso de leer este escrito. Orgulloso porque creo en la juventud, creo en sus posibilidades, y como bien decis en que sabéis cuando debéis tomar las decisiones que os competen y en las que considero que estáis en perfecto derecho siempre y cuando prevalezca el respeto por los demás. Es el momento, el momento de pasar el testigo a nuestra juventud.
Ningún otro partido que no sea un partido de ideales progresistas os podría decir esto que os digo yo aquí y ahora.
Alabo vuestra decisión de apoyar una manifestación sobre el tijeretazo de forma libre y sin coacciones eso quiere decir que en la enseñanza pública, la gran enseñanza pública que sobre todo hasta ahora se tiene en Santomera, se os ha formado en valores y libertades que dentro del orden que os corresponde por edad habéis ejercido con valentía "por propia voluntad y sin ningún tipo de manipulación" según vuestras propias palabras.
Enhorabuena por ser adultos de pensamiento y defender para vosotros y para el futuro lo que consideráis justo, sin miedo, con convicción, con la convicción de que queréis una enseñanza pública y de calidad.
Estos son los alumnos del Instituto de Enseñanza Secundaria Poeta Julián Andúgar. Enhorabuena a vosotros y a las personas que a lo largo de vuestro corto recorrido os han hecho madurar. Vuestro es el testigo.
Una vez leído el comentario del anónimo de las 18,08 vemos que no es nada más que palabrería: "ningún otro partido que no sea un partido de ideales..."
A esta persona se le ve el plumero tratando de alinear a la juventud con su partido. Me cuesta comprender a gente que parece apoyar los recortes a los pensionistas y sin embargo no les parece bien que se regule más y mejor el gasto en educación. Creo que simplemente tratais de buscar el voto de los más jóvenes que son quizá los que aún están por decidirse y optais por olvidar a las generaciones más mayores porque por lo general, suele haber mucha abstención de estos grupos sociales.
Pura palabrería electoralista.
Me parece bien que este blog se haga eco de la respuesta de los alumnos del IES de Santomera a las palabras del gobierno municipal, pero me parece curiosísimo que, por poner un ejemplo, no se haya escuchado ni una sóla voz de denuncia ante la agresión del consejero de cultura.
Mi más sincera enhorabuena por vuestro escrito.
Garantizáis la esperanza de libertad, serenidad y cultura para el futuro.
Vuestra madurez es loable.
Y..., vuestra enseñanza a un párvulo en educación y cultura también.
ANONIMO DE LAS 17.09.COMO QUIERES QUE ALGIEN SE MANIFIESTE EN CONTRA DEL FASTAMA DEL AGRESOR DEL CONSEJERO CRUZ.
¿DONDE ESTAN LOS SOSPECHOSOS?,NI LA VERDAD, PERIODICO DE LA DERECHA DICE NI MUS,¿QUE HA PASADO?,QUE SALGA SU PARIENTE PRESIDENTE A DECIR LO QUE SABE, Y CUANDO NO QUE SEAN LOS DE IZQUIERDAS QUE SON MUY MUY MALOS,PARA ELLOS CLARO.TALVO
Anonimo de las 13:08, yo tengo la teoría de que se golpeó a sí mismo. Que cara más dura... ahora menos dura.
Anónimo del día 6 de abril a las 17:09, tratar de seguir intoxicando con el tema del ineficaz consejero de cultura (con minúscula) de nuestra Región es tan indigno como quienes desde el primer momento de tal agresión señalaron, divulgaron el nombre, su dirección, su pueblo…, de un ciudadano honorable, siendo falsas todas las imputaciones de las que le acusaron. Además de indigno y difamatorio fue una bajeza moral.
A un ciudadano de esta Región, que creo que consideran su finca particular, no se le puede quebrar alegremente la vida por unos ineptos, calumniosos e ineficaces políticos. Atacaron, igualmente, a la “izquierda poliédrica” sin saber tan siquiera qué es un poliedro. Trataron de echar una cortina de humo y unas falsedades indignas contra las personas que se manifestaban libremente, profesores y funcionarios, contra su ineficacia, su falta de pudor al plantear restricciones, excepto para su bienestar, en todo tipo de ámbitos sociales y una falta de ética como gobernantes digna de un subdesarrollo mental inaceptable para el cargo que desempeñan.
Y ahora, cuando se ha tapado, hundido en las arenas movedizas del olvido, cuando no nos enteraremos nunca de qué sucedió verdaderamente, cuando el sobrinísimo político está castigado por realizar en Cultura una política aberrante para esta Región, viene usted, escondido en su anonimato, tratando de que caigamos al suelo pidiendo perdón por no habernos acordado de tan deficiente ser…, ¿sabe qué le digo, conciudadano?, que es una vergüenza y un bochorno personal para mí ser conciudadano suyo.
Bamboso: su soberbia queda patente en sus palabras.
En primer lugar, usted es el que intóxica utilizando el apelativo de "sobrinísimo" sin siquiera entrecomillarlo, porque como bien sabrá no existe parentesco carnal entre los nombrados por usted.
En segundo lugar, no creo que sea vergonzoso recordar que alguien agredió a un representante político del pueblo elegido democráticamente por este en la puerta de su domicilio, a traición y por el mero hecho de ser personaje público y político. Si 300 amigos decide pasar por alto la condena de este hecho, y a usted le parece innecesario y "bochornoso", me alegro de que la mayoría de representantes y políticos de la oposición sí quisieran hacerlo, eso demuestran que no son como usted.
En tercer lugar, fue la policía quien detuvo a este chaval, "seguramente" porque creyeron que algo tuvo que ver, si después se demostró que no, quizá habría que poner en tela de juicio a quien decidió detenerlo sin más pruebas, no al que recibió una patada en la cuenca del ojo.
En cuarto lugar, le ataco porque me siento atacado. Hasta ahora nunca me planteé que me diera vergüenza ser su conciudadano, sin embargo en cada nuevo comentario suyo me doy más cuenta de su capacidad de excluir pensamientos y opiniones que no le son favorables, lo cual dice mucho de usted y es por ello que no necesito expresar en público que és lo que verdaderamente pienso de su persona, entre otros motivos, porque para ello creo que debería conocerle más de cerca y con cierto grado de profundidad. A mi no es vergüenza lo que me provoca sino más bien lástima. Se le ve tan bónico en las fotos...
Si, siempre he sido bonico (no bónico, a ver si vamos sabiendo acentuar), guapetón. Pero lo que nunca he sido es intoxicador. Esa indigna labor la dejo en manos del excelso partido al que parece defender a ultranza.
Le explico, conciudadano anónimo. Sobrinísimo político es totalmente correcto. Debería aprender lo que significa político. Se lo digo porque creo que no será capaz por si solo de buscar su significado: político quiere decir no carnal. Por ello, la expresión es correcta y como otras muchas veces, un seguidor de ese partido tan preocupado por España, se equivoca en apreciaciones gratuitas. Aprenda a leer comprensivamente.
Por supuesto que no puedo tener la misma opinión que partidos de la oposición. La razón es sencilla: no pertenezco a ningún partido, creencia o grupo de ninguna naturaleza. Por ello, mi pensamiento es mío y punto. Si pretende atacar al Partido Socialista Obrero Español, va Vd. por mal camino. Y, por supuesto que me parece un hecho bochornoso. Los periódicos que están a su servicio, cual lacayos esperando un pedazo de pan, publicaron no ha mucho que estos hechos, en circunstancias diferentes, se habían producido en otras ocasiones. Léalo que para eso le pagan a quienes se afanan en publicar “sus” noticias.
Mire Vd., anónimo (me pregunto por qué se ampara en el anonimato ¿tiene reparo en decir su nombre?, ¿no estamos en un País libre?, ¿no podemos opinar sin calumniar lo que creamos justo? Si será eso, será que la calumnia es su bandera), involucrar la profesionalidad de la Policía es inadmisible, rastrero, un desprestigio para todo el Cuerpo de Policía Nacional y una bajeza moral. La Policía cumplió con su deber a tenor de lo expresado por el ínclito, ineficaz e inepto consejero. Detuvo a quien supuestamente era un sospechoso pero LA POLICIA NO DICE NOMBRES DE DETENIDOS QUE NO HAN SIDO JUZGADOS Y CONDENADOS. Ese nombre de un ciudadano cuya vida se vio truncada por la acusación impropia de quien no pudo identificarlo cuando estaba a menos de dos metros de él, es BOCHORNOSO que se publique a los cuatro vientos filtrando la identificación desde políticos, NO desde la Policía. Han estado tan acostumbrados durante un inmenso período de tiempo a que la Policía estuviese a su servicio que, ahora que está al servicio de TODOS, su falta de preparación democrática no les deja comprenderlo.
Atacar es propio de Vds. Hágalo, hágalo que así afila las uñas para cuando se encuentre en un puesto de poder. Sentirse atacado por mí corrobora mi apreciación de que debe leer Vd. con lectura comprensiva. Nada más lejos de mi pensamiento que atacarle a Vd. que sospecho que no tiene nada más que un defecto: seguir el dictado de quien pregona una política de descalificaciones y calumnias.
Mire, nunca reprima una opinión pública. Quienes entendemos que el diálogo es el único camino para solucionar todas los problemas de este nuestro mundo, entendemos que la expresión sea libre, no reprimida. No se reprima. Diga lo que quiera. Pero, claro, tiene Vd. razón. Para opinar sin insultar debería conocer con quien habla y no sólo por una fotografía. No es necesario que entablemos una amistad, le aconsejo que, ya que me ve en fotografías, me lea, con lectura comprensiva claro, en mi blog personal. Si se marea cuando intente leer alguno de los artículos, déjelo, déjelo enseguida porque podría dañar las dos o tres neuronas que posee.
Lo dicho, señor Bamboso, aunque después de volver a leerle ni yo mismo sé por qué mantengo esa deferencia hacia usted llamándole señor, usted sólo se retrata.
Puesto que soy libre como bien usted dice, seguiré en el anonimato, para decirle que yo no sigo el dictado de nadie para redactar mis propias opiniones, mucho menos el suyo. Si es cierto que yo, aún no le insultado, menospreciado, o faltado al respeto de cualquiera de las formas posibles, usted lo hace al revés, no es que falte al respeto: es que no muestra ninguno por opiniones distintas a la suya. Y no seré yo quien le recuerde qué tiempos rememoran comportamientos como el suyo.
Ya le digo yo que no soy tan ducho en el uso del lenguaje como usted, y por tanto mis artimañas lingüísticas para intentar dejarle por debajo de mi anónima figura serían menos sutiles que las suyas, aunque le reitero para para ser una persona respetable y respetuosa no hace falta ningún doctorado.
Por lo visto usted me mide en función del mal uso que hice de una tilde, y de ahí extrae que mi número de neuronas es bastante más bajo que el suyo propio. No me duele, porque a estas alturas ya me he dado cuenta de que usted necesita en todo momento sentirse superior, de hay su blog y su participación en 300 Amigos que, a diferencia de las aportaciones de los grandes tecnócratas de nuestro tiempo, éstas últimas solían tener un sentido práctico.
Ciertamente nunca deseé que se mostrase de acuerdo conmigo, pero también es cierto que le he leído unas cuentas veces, más de una, y he visto como su complejo de superioridad y de posesión de la verdad única e infinita se muestra en cada línea de su texto.
Ya ha demostrado su grandeza, casi tanto como su bajeza. Ahora acérquese al suelo, y respéteme porque sin ser doctor y sin carrera universitaria, hay doctrinas que no se aprenden en los centros docentes.
Por último, leerle a usted me marea, sí me marea, pero el motivo es bien distinto al que usted presupone. Extenso y aburrido, con poco contenido práctico, y escasa elocuencia, distante y frío, con tendencia al polisílabo, y mostrando una magnífica autocomplacencia.
"Bonico" no lleva tilde, pero las dos primeras de "conde duque de Olivares" se escriben con mayúscula. "Leyendo comprensivamente" y dado que posee un gran currículum académico usted me entiende...
Siento el intermedio temporal que ha pasado sin responderle. Cuestión de no leer con tanto afán como usted.
Muchas gracias por su deferencia al leer propuestas relativas a pensamientos personales, didácticos o de convivencia social. En cualquier caso, no acierta sobre determinadas cuestiones de redacción o sintaxis.
Mire, anónimo, fue usted quien desvió la atención, como trata de hacer ahora con su diatriba sobre lo que piensa de mi, de un artículo bien claro sobre una cuestión absolutamente distinta de su proposición. Es normal. Es el método empleado por quienes no explican cuestiones evidentes y claras: ¡desviemos la atención del problema planteado!
Puede usted pensar lo que quiera pero no nos de lecciones. No nos de lecciones de aparente serenidad, que no tienen ustedes; de sosiego, del que carecen por su irritante prepotencia; de pacíficos seres, que no son; de bienhechores de los menos favorecidos, con quienes les da vergüenza mezclarse; ni de afectuosos convecinos, que tampoco tienen como norma de comportamiento.
Sus largo, reiterativo y pesado escrito está pleno de insultos, no sutiles como bien dice, sino despreciables y banales. ¿Desde cuando me conoce usted? ¿De verdad? Mire, cualquiera que sí me conozca, sea de la condición que sea y de la corriente de pensamiento que sea le rebatirá a usted sus insultos hacia mi persona.
Y ahora, anónimo, basta de perder el tiempo. Es la última vez que respondo a palabras sin contenido que tratan, como he dicho anteriormente, de desviar la atención de problemas más importantes y perentorios.
Como dice mi nieta: ¡fin para siempre, chin pum!
Anónimo, siento que no haya aparecido debido a un error en los electrones juguetones (¡sí, todos tenemos errores, lo difícil es reconocerlos!), una recomendación que le sugiero, solo se la sugiero.
¡No se menosprecie, mujer/hombre, no se menosprecie! Usted tiene la valentía de decir lo que piensa y quienes le leemos igual.
Las apreciadas virtudes y los potenciales defectos son absoluta y totalmente subjetivos. Nadie está en posesión de verdad alguna. El problema es que tampoco nadie puede erigirse en guardián de ella sin tener siquiera razones para sostenerla.
¡Que bien Bamboso! esta vez no me va a contestar, ¿lo promete?
Veo que cuando lo hace me lee con desinterés, típico en usted, pues en las dos ocasiones que lo hizo no se dio cuenta de que yo siempre dije no conocerle, sin embargo usted entendió que sí. Repito: no le conozco, igual que usted a mí. Sólo sucede que usted se permitió la descortesía de despreciarme directamente en su primer escrito, y por contra no transigió cuando yo hice lo mismo. De momento yo no hice la broma sobre su número de neuronas, aunque con la edad ya se sabe...
No es que desvíe la atención del tema propuesto, lo que sucede es que hay otros que me interesan mucho más y que aquí siempre se obvian, por cuestiones evidentes, claro.
Y para acabar, le diré que no entiendo porque se refiere a mi en segunda persona del plural, puesto que soy una sóla persona que, como ya le dije, tengo mi propia opinión y no sigo el dictado de ninguna corriente, tendencia ni grupo político, por supuesto, tampoco el suyo.
No dudo de su valía intelectual ni de la calidad de sus aportaciones en distintas áreas culturales, pero para serle sincero, lo que sucede es que me molestó mucho que su primera respuesta hacia una opinión mía fuese el desdén, cuando en un estado de derecho todas las opiniones son igual de válidas.
Fíjese que yo lo que hacía cada vez que me dirigía a usted es defenderme de sus ataques con un nuevo contraataque, de modo que si usted me hubiese respetado yo no me habría visto en la necesidad de responderle con la misma moneda.
¿Lo entiende ahora o tampoco quiere escuchar esta vez?
¡Chin pum, pataplum!
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